FINTAS, COMO EN EL POKER.
“Voy
a cumplir con mi palabra”, dice un político en campaña electoral, sin decir a
qué palabra se refiere.
Se
me hace que esta frase contiene la estructura de la noción de verdad
neoliberal, llamada post verdad.
Nadie
sabe a qué se refiere esta denominación, porque hasta ahora la verdad cultural,
la verdad de la gente era una; existía una verdad objetiva. Hubo después una
época de transición que respondió a la frase: ´que cada uno tiene su verdad. ´
En
la frase del político actual, parece que la post verdad es sostener la
existencia de una verdad, que está en un lugar de la habitación que no se puede
encontrar.
Para
que sea post verdad, en este momento en que estoy hablando – como en este escrito,
por ejemplo – decir la verdad no debe coincidir, en el tiempo, con la prueba de
la verdad. No, hoy no; la prueba se la doy mañana. No porque sea una estafa en
que le digo una cosa y después resulta que es la contraria, sino porque no se
sabe de qué verdad se habla, lo que resulta conveniente para el que habla.
La
post verdad es una intención de verdad. Ya se verá en otro momento hasta donde
coincide o no con la verdad verdadera, la verdad probada.
La
Post Verdad es un discurso que no se compromete consigo mismo.
Se
ha pasado del ´si lo digo lo hago´, al ´si lo digo´ a secas.
Esto,
como la parte esencial del post modernismo, ha tomado una lección del
psicoanálisis acerca que el deseo es variable en su objeto, pasándose tres
pueblos; llegando a creer que el objeto no se puede definir.
Donde
el mismo psicoanálisis se ve obligado a poner un límite a este deseo, basándose
en la realidad, a lo que se ha llamado,
con justeza, ´criterio de realidad’.
Usted
vuele en brazos de su deseo; no un sea neurótico que quiera saber de antemano
todas las cosas; pero tampoco sea lo contrario de un neurótico, un perverso que
sabe que hay que bajar la patita al suelo, pero no le hace caso, haciéndose el
distraído, para llenar el cartón con lo que le convenga. al paso de las
circunstancias. Volamos, volamos, somos felices, volamos.
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